Viñedos

El viñedo se mimetiza con la vegetación autóctona, de montaña mediterránea, que se identifica después en los balsámicos del vino.

40 hectáreas en propiedad, repartidas en 6 fincas distintas: Torremadrina, Mas de Freixes, Trufes, La Masadeta, Camí de Vilalba y Benufet. Máximo control y prevención en el viñedo para asegurar la calidad des del inicio del ciclo productivo hasta el punto óptimo de maduración. Cultivo de 6 variedades de uva, principalmente garnacha blanca y tinta, pero también macabeo, tempranillo, merlot y syrah para coupages.

La altitud media oscila entre los 350 y los 500 metros. La zona de producción está delimitada por los Ports d’Horta en el sur y las sierras de Pàndols y Cavalls en el sur-este, de manera que las vides encajan hacia norte y oeste con la variada orografía del territorio, a menudo emplazadas en terrazas naturales protegidas de la erosión por los márgenes de piedra seca.

Suelos

De origen cuaternario, de naturaleza arcillosa-calcárea y pobres en materia orgánica. Suelos de panal e incluso algunos de origen fluvial con abundantes cantos rodados.

Terroir

Transmitimos los valores del viñedo y del terruño a los vinos. El nuestro es un entorno privilegiado. Con un clima y unas variedades autóctonas que confieren un carácter propio y auténtico al vino, al que añadimos el esfuerzo y el trabajo en equipo como filosofía.

Factor Humano

Además de las tareas habituales en el campo, realizamos ejercicios de poda en verde de forma continuada (tres podas cada ciclo) para asegurar un microclima especial en el entorno natural. Controlamos la producción y usamos riego de soporte.

Respetamos las variedades tradicionales de la DO Terra Alta y vendimiamos en el momento justo de maduración de la uva. Realizamos controles para asegurar el correcto desarrollo del viñedo, buscando siempre la máxima expresión del racimo.

Garnacha Blanca

Es la la variedad emblemática de la DO Terra Alta donde se produce alrededor del 33% mundial de la uva. De nariz sutil, con alta intensidad de sabores en boca, fruto del carácter Mediterráneo.

Garnacha Tinta

También autóctona y perfectamente adaptada al clima y al suelo de la Terra Alta. Es la variedad mayormente utilizada para la elaboración de tintos. Expresión amable y frutal, con fondo balsámico.

Clima

Mediterráneo seco, con dos tipologías de viento que marcan muy claramente la vitivinicultura de la región: el cierzo y el ábrego. El cierzo sopla con fuerza y mantiene las vides y las uvas sanas, en maduración. El ábrego y las marinadas del Mediterráneo refrescan el cálido verano, que es muy secos y con elevadas temperaturas. Contrastan con los inviernos húmedos  y muy fríos. La pluviometría anual es muy escasa y va de los 350mm a los 500 mm según la zona de la comarca.